domingo, 19 de noviembre de 2023

PONER UNA MESA, PROTOCOLO

 CÓMO PONER UNA MESA DE   INVITADOS 

Consejos básicos de protocolo en la mesa







 Fuente: https://www.hosteljiel.com/

Poner la mesa es algo que todos hacemos a diario pero saber cómo poner la mesa de manera adecuada no es algo que todo el mundo domine. Cada pieza dentro de la mesa tiene un porqué y saber distribuir los elementos de manera adecuada y con estilo es definitivamente un arte. Por eso oy te queremos dar algunos consejos para que aprender a poner la mesa de manera correcta.

Y es que…poner la mesa en si es un arte, elegir la combinación perfecta y cuidar cada detalle es una tarea nada desdeñable y qué mejor época que la Navidad para demostrarlo. Este año no vamos a poder disfrutar de grandes cenas con toda la familia, pero poner la mesa para los más allegados nos hará en la medida de lo posible mantener la ilusión y… ¡practicar para el año que viene!

La mantelería: atrévete con las combinaciones y arriesga

Empieza por el mantel, este va a ser lo primero que deberás acomodar en la mesa. Asegúrate de que el mantel cubra toda la mesa, es preferible que quede grande a que quede pequeño, no hay nada más horrible que un mantel raquítico. Si la mesa es delicada, debajo del mantel conviene poner un muletón para proteger la mesa.

Los clásicos nunca fallan: los manteles de hilo, lino o satén son los recursos más utilizados por todos. En relación al color… no hay nada escrito. Guíate por el color de la vajilla y elige algún color del mantel como color predominante de la mesa. Aquí sí que te podemos decir que hay combinaciones que parecen imposibles y después resultan lo más. Atrévete a arriesgar, ¡a veces más es más!

Si dudas, no te vuelvas loco, elige tonos claros y suaves como blancos, crudos o beige. En comidas o cenas formales a veces es mejor no guiarnos por la moda o el gusto personal y decantarse por colores sobrios y elegantes.

La servilleta puede ser igual o diferente al mantel y la podrás colocar sobre el plato o a la izquierda de este. Aunque la posibilidades de cómo colocar las servilletas en la mesa son infinitas y dan para un artículo en sí.

La vajilla: la reina de la mesa

La vajilla es una de las piezas claves en una mesa. Una buena vajilla no solo hará que tu mesa luzca mucho más elegante sino que hará que los platos sepan mejor.

Monta la mesa con un plato de presentación o un bajo plato. Sobre este plato nunca se debe comer y es un elemento meramente decorativo por lo que encima deberás colocar uno llano y sobre el uno de inferior tamaño o uno hondo. Dependerá del menú que vayas a servir.

El estilo de la vajilla dependerá del tipo de mesa que quieras montar: moderna, clásica, con platos de diseño… pero recuerda tener suficientes piezas iguales para poder servir a todos los invitados.

Elige fuentes y bandejas grandes para la presentación de la comida. Puedes ponerlas en el medio de la mesa o pasarlas por cada comensal para que se sirvan y retirarlas a una mesa de apoyo o gueridon.

Los platos van a guiar el espacio de la mesa y en gran medida también su decoración. Pon el mantel, después acomoda la vajilla y una vez tengas esto, el resto de elementos como cubertería o cristalería vendrá rodado.

Colocación de la vajilla en la mesa

En este orden y de abajo a arriba coloca la vajilla:

1º Bajo plato o plato de presentación

2º Plato llano

3º Plato de postre o plato hondo

4º Platillo pan a la izquierda

La cristalería: al buen vino, buen cristal

Decide si vas a servir un borgoña, un burdeos, un vino rosado con aguja… Elige bien las copas, una buena copa de vino o de champagne puede cambiar de manera drástica la bebida que ponemos dentro. Aunque nos parezca mentira, beber en una copa de cristal fino y con la forma adecuada nos hará disfrutar más de la bebida y por qué no decirlo, de la velada.

Copas burdeos

Las copas tipo burdeos te las recomendamos si vas a servir un vino potente. La forma redonda de la copa hace que pueda oxigenarse bien y te permitirá apreciar cada todos los aromas del vino.

A estas copas se las llama también tipo tulip, son altas y estilizadas. Al contrario que las copas de borgoña, estas copas no son muy cerradas en la boca. Las copas de burdeos son de las más utilizadas puesto que se adaptan bien a casi cualquier tipo de vino. Podríamos decir que es una copa que vas a utilizar de manera habitual si te gusta tomarte una copita de vino de vez en cuando.

Copas borgoña

Las copas de borgoña son redondeadas, en forma de copa de balón y suelen recomendarse para tintos muy aromáticos y voluptuosos. Tienen mucho más diámetro que las copas de burdeos y son mucho menos estilizadas. Es un tipo de copa más especial y que no te resultará tan versátil como la de burdeos.

Copas para vino blanco

El vino blanco se suele beber en copas tipo tulip (como el burdeos) pero de menor tamaño. Su tamaño más comedido se debe a que un vino blanco no debe de oxigenar tanto como un tinto y además debe mantenerse frío el mayor tiempo posible.

Utiliza este tipo de copas para blancos, rosados…incluso tintos jóvenes.

Copas para vinos espumosos y champagne

En navidad no puede faltar una copita de cava o champagne. Para cualquiera de los dos te recomendamos una copa tipo flauta, a poder ser con la base en tipo “v”. La forma en V de la base hace que la burbuja suba por la copa de manera perfecta.

Si quieres salirte de la típica copa de flauta, puedes innovar usando una copa de prosseco. Estas copas dan a los espumosos una nobleza que saca lo mejor del carácter del vino. Además son súper practicas porque puedes usarlas para champagne, para un espumoso y hasta para un vino riesling. En general estas copas son perfectas para cualquier vino que tenga algo de aguja.

¡Recuerda servir estos vinos muy muy fríos! Ayúdate de una cubitera o champanera para que no suba su temperatura mientras coméis.

Colocación de las copas en la mesa

En este orden y de izquierda a derecha, coloca las copas:

1ª Copa de agua

2ª Copa de champagne o cava

3ª Copa de vino tinto

4ª Copa de vino blanco

Los cubiertos: los primeros son los últimos

La cubertería es otra de esas cosas especiales en la mesa. Hay familias que guardan la cubertería buena durante toda la vida y la van pasando de generación en generación. Todo amante de la buena mesa tiene más de una cubertería en casa y es que es un elemento fácil de almacenar porque ocupa poco espacio y no se deteriora con facilidad, por lo que comprar una nueva no implica deshacerse de la anterior.

Puedes usar una cubertería con corte clásico como el típico modelo baguette, tirar por modelos modernos con líneas finas y rectas o incluso usar cubiertos de colores como las tan de moda, cuberterías doradas o negras.

Para colocar los cubiertos en la mesa, lo primero que tienes que saber es que  los cubiertos es que los cubiertos se colocan a la inversa del orden de uso, esto es que se pone más cerca del plato lo que más tarde se va a utilizar. Además, los tenedores siempre irán a la izquierda y los cuchillos y las cucharas a la derecha. El ángulo de los cubiertos es importante, cuida que estén bien alineados para que no de sensación de caos.

Colocación de la cubertería en la mesa

En este orden y de adentro hacía fuera con respecto a la vajilla:

A la izquierda:

1º tenedor de carne

2º tenedor de pescado

3º tenedor de ensalada

A la derecha:

1º Cuchillo de carne

2º Pala de pescado

3º Cuchara

El cuchillo se colocará siempre con el filo hacia el plato.

Parte superior de los platos:

1º Cuchillo postre

2º Tenedor postre

3º Cuchara de postre

La cuchara y el cuchillo con el mango hacia la derecha y el tenedor con el mango hacia la izquierda.

Ahora que sabes el protocolo para poner la mesa, hazte con los elementos que te falten y ve ideando tu mejor combinación, a partir de ahora tienes las claves para ser el mejor anfitrión.




domingo, 12 de noviembre de 2023

LA "MODA" DEL SUSHI

 LA MODA IMPARABLE DEL SUSHI



Sushi: el alimento de moda saludable y delicioso

martes 18 de junio de 2019, 08:19h

 

Mireia Elías, nutricionista de Instituto Centta, nos da las claves para disfrutar de este manjar de la gastronomía nipona que es sano, saciante y saludable si no cometemos excesos con la soja.

Este martes, 18 de junio, se celebra el Día Internacional de Sushi, motivo por el cual los amantes de la gastronomía nipona tienen una excusa más para disfrutar de uno de los platos más populares del globo.

Esta receta, originaria de Japón, se compone de arroz avinagrado acompañado con verduras y/o pescado crudo envuelto en algas marinas con sus múltiples variedades. A la vez, estas pequeñas piezas de arroz se pueden presentar de diferente forma y así, según su forma, atienden a diferentes nombres en una carta. Aquí, algunas de las piezas más populares:

  • MAKI: arroz avinagrado con verduras y/o pescado envuelto en algas.
  • NIGUIRI: base de arroz avinagrado en forma ovalada con pescado o marisco en su superficie.
  • SASHIMI: láminas crudas de pescado o marisco, sin arroz.
  • CALIFORNIA ROLL: un maki invertido.
  • TEMAKI: cono de alga relleno de verduras, pescado y arroz.
  • SPRING ROLL: maki envuelto en oblea de soja.


La primera duda que surge es cómo de saludable es este plato y si lo podemos incluir en nuestra dieta. La nutricionista de Instituto Centta, Mireia Elías, asegura: “La dieta japonesa se encuentra entre las más sanas del mundo y posee uno de los porcentajes más bajos de enfermedades cardiovasculares entre los países occidentales”.

Por un lado, el sushi presenta estos beneficios:

  • El pescado que presenta es una buena fuente de grasas saludables por los omegas que contiene, los cuales están relacionados con nuestra salud cardiovascular.
  • El jengibre y el wasabi, dos ingredientes muy utilizados, facilitan nuestras digestiones.
  • Es un plato con un buen aporte de proteínas y un bajo contenido en grasas y calorías (20-30kcal por pieza). Una ración de 8-12 piezas rondaría las 250-350kcal.
  • Resulta un plato saciante.

Sin embargo, por el contrario también tiene algunos inconvenientes:

  • La presencia, excesiva a veces, de sal. Una cucharada de salsa de soja puede llegar a contener 900 mg de sodio y la FDA (Food & Drug Administration) establece un máximo de 2400 mg de sodio al día. Esta está muy relacionada con la retención de líquidos y la hipertensión arterial. Debido a esto, cada vez más restaurantes están reduciéndola y en muchos supermercados podemos encontrar salsa de soja baja en sal con una cantidad de sodio de 500 mg.
  • El azúcar añadido, las salsas como la mayonesa e ingredientes como la cebolla frita se añaden a las piezas de sushi para que sean más palatables y, por lo tanto, gusten más al consumidor. Ingredientes que no están presentes en la receta original y que aportan más calorías.

Además, la nutricionista Mireia Elías destaca que se debe tener en cuenta que:

  • No es recomendable abusar debido a que las algas tienen gran concentración de yodo y existe una clara relación con las enfermedades tiroideas.
  • El pescado crudo puede contener un parásito denominado Anisakis, por lo que debemos asegurarnos de su origen y haber sido previamente congelado. También contiene mercurio, un metal que en exceso puede ser perjudicial. Por estos dos motivos las embarazadas no pueden ingerir este plato.

Curiosidades del origen del sushi

La palabra “sushi” hace referencia a la unión de dos palabras, Su (vinagre) y Shi-Meshi (arroz), por lo que sushi se podría traducir como arroz avinagrado. En definitiva, esta palabra hace referencia al plato que elaboramos con este arroz, pero no a los pescados, mariscos, carnes o verduras con los que lo acompañamos.

Los orígenes del sushi están en la antigua China. Hay algunos informes que datan este alimento en el 400 A.C, donde preservaban el pescado con el moho surgido del arroz fermentado, que no se consumía y que hacía las veces de conservante.

Afortunadamente, esta costumbre evolucionó, los japoneses tomaron el testigo y convirtieron el plato en lo que hoy conocemos como sushi. La referencia más temprana del sushi en Japón apareció en el año 718, aunque no fue hasta mediados de 1800 cuando se conoció la versión más parecida a las actuales piezas de sushi de la mano del cocinero Hanaya Yohei. Esto supuso el inicio del fast food de sushi en el país del sol naciente, aunque el tamaño de las piezas en esta época era mucho mayor que las actuales.

FUENTE: https://www.madridiario.es/